Un hombre de origen colombiano presuntamente se encuentra en calidad de detenido en Cuautitlán acusado de robo, aunque no hay pruebas fidedignas.

El colombiano Andrw Sabogal Agudelo llegó hace casi un mes a México para trabajar en una empresa que se dedica a prestar dinero en donde “le iba bien”, dice su esposa Nasly Julieth Montenegro Muñoz, a quien le enviaba parte de su sueldo a la ciudad de Tuluá Valle, Colombia, en donde radica con la hija que procrearon juntos.

En su trabajo, Andrw se sentía a gusto pero su pesadilla inició el pasado 5 de agosto cuando fue víctima de la delincuencia en calles de la Ciudad de México; lo despojaron de la motocicleta en la que se transportaba para realizar su trabajo y dio aviso a su centro de trabajo, en donde al parecer, la empresa no hizo la denuncia por robo.

No obstante, Andrw avisó a su esposa que fue asaltado, pero que estaba bien y continuó trabajando en la empresa hasta que el día 10 de agosto sus jefes inmediatos le dijeron que fuera a recoger una moto nueva que le entregaría en el municipio de Cuautitlán Izcalli. Al llegar al lugar indicado ya lo esperaban unos policías que se lo llevaron.

Ese día ya no habló como era su costumbre a su esposa y la preocupación comenzó: “al no saber nada de él, lo traté de localizar y nada, llamé a la empresa, creo que se llama Presta Pronto, y no me dieron información”, relata Nasly.

Fue hasta el día 11 de agosto que Andrw se comunicó con su esposa para decirle que estaba detenido y que desconocía los motivos; fue todo, a partir de ese momento perdió comunicación él.

Nasly ha intentado conocer sobre la situación jurídica de su esposo pero no hay autoridad que le proporcione información fidedigna, sólo la embajada de Colombia en México le dijo que se encontraba detenido en Cuautitlán, acusado de robo y le pidieron una serie de requisitos para comprobar que son familia, pero no están casados, “me piden el acta de matrimonio y el acta de mi hija para demostrar que estamos juntos desde hace 12 años y que la niña lleva nuestros apellidos”.

Ante esta situación, Nasly pide la intervención de organismos de derechos humanos para que colaboren en la búsqueda de su esposo, pues aunque ingreso como turista sin permiso para laborar, no significa que se trate de un delincuente. Los días pasan y nada se sabe del paradero de Andrw.