miércoles, abril 24, 2024

La vialidad es costosa y peligrosa y cada vez son más comunes los accidentes fatales, dicen usuarios.

Ejidatarios, comuneros y productores de la región Atlacomulco solicitaron que se elimine el peaje del tramo de la carretera Panamericana que va de Toluca al municipio cuna de la clase política mexiquense, en virtud de que forma parte de una vía libre que cruza América Latina y fue gestionada por la comunidad, de la opacidad de la concesión, sus elevadas cuotas y falta de seguridad.

Los campesinos indicaron que la vialidad es costosa y peligrosa y cada vez son más comunes los accidentes fatales en los que se ven implicados camiones de carga y el costo por utilizarlo es de 86 pesos para un automóvil, y 124 para una camioneta.

El diputado Morenista Max Correa se reunió con los inconformes y tras escuchar sus argumentos, el legislador dijo que promoverá un exhorto a las autoridades estatales para que el tramo carretero de la autopista Panamericana Toluca-Atlacomulco quede libre del pago de peaje y sea ampliado; esto debido a que su construcción fue gestionada por ejidatarios que los gobiernos del Partido Revolucionario Institucional (PRI) después convirtieron en un negocio privado.

Incluso recordó que fueron las comunidades aledañas a la autopista las que hicieron posible su construcción durante el sexenio del presidente Lázaro Cárdenas, “pero los gobiernos del PRI la convirtieron en un negocio de particulares”.

Por su parte, Everardo Lovera, presidente de los productores de maíz de la región de Atlacomulco, resaltó que en el pasado sexenio existía la intención de ampliar los tramos carreteros, “pero nunca sucedió y tampoco sabemos cuál es la empresa beneficiada por tal concesión. Por eso creemos que fue otorgada de manera irregular”.

El sistema panamericano de carreteras, expuso, surgió en la década de 1930, como resultado de un tratado internacional que tiene el objetivo de conectar el sur del continente (desde la Patagonia) con norteamérica. No obstante, lamentó, hace unos sexenios, los gobiernos estatales impulsaron un proyecto para concesionar el tramo Toluca-Atlacomulco a cambio de mantenerlo en óptimas condiciones.

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