viernes, abril 19, 2024

Biología, ciencia que ofrece atención a problemas sociales en rubros como salud y medio ambiente.

Moisés Tejocote Pérez, coordinador del Centro de Investigación en Ciencias Biológicas Aplicadas de la UAEM, destacó que este espacio cumple seis años de funciones, en los que ha aplicado la ciencia en pro de la sociedad.

Con el empleo del conocimiento científico al servicio de las necesidades de la población, académicos del Centro de Investigación en Ciencias Biológicas Aplicadas (CICBA) de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM) desarrollan trabajos para establecer vínculos con la sociedad que puedan dar atención a rubros como la salud, la educación y el medio ambiente, donde las diversas vertientes de la biología pueden tener impactos positivos.

Desde su fundación en septiembre de 2014, el CICBA ha impulsado la idea de que todo conocimiento debe tener una aplicación en pro del avance científico del país, ejemplo de ello es el desarrollo de un sistema de deshidratación de alimentos que permitió la creación de un aditivo de hongos pulverizados, el cual demostró fortalecer el sistema inmunológico aumentando la cantidad de linfocitos.

A propósito del sexto aniversario del CICBA, Moisés Tejocote Pérez, coordinador del centro, señaló que hace cuatro años inició este proyecto, que ha arrojado evidencia de que el encapsulado con base en hongos aminora los síntomas de infecciones virales, como influenza y gripe común.

Precisó que este aditivo fue probado en pacientes con enfermedades respiratorias virales, por lo que una vez terminado el desarrollo de este sistema, el cual lleva un 85 por ciento de avance, podría sugerirse como un método para aminorar la gravedad de síntomas a padecimientos como la COVID-19, ya que está preparado para generar una mayor cantidad de anticuerpos.

El investigador universitario señaló que el aditivo, de nombre “ACovTer-1”, no es un fármaco, sino que se trata de un alimento encapsulado que se complementa con la dieta diaria de una persona, por lo que no tiene efectos secundarios y además ha demostrado ser beneficioso en otras áreas de la salud como la prevención de infecciones urinarias y otras enfermedades como anemia y el tratamiento de algunas alergias.

Actualmente el CICBA cuenta con siete investigadores con reconocimiento local e internacional, dos de ellos en el Nivel 1 del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología. Asimismo, se ha desarrollado innovación tecnológica con la creación de patentes y prototipos para convertirse en un espacio de autofinanciamiento que promueva la inversión del capital privado.

De acuerdo con el investigador, el CICBA busca consolidar lazos de cooperación con los gobiernos locales a fin de generar políticas públicas encaminadas a la sustentabilidad y a impulsar la ciencia como la solución de problemas asociados al agua, el suelo, la biodiversidad, la producción local y problemáticas relacionadas con el calentamiento global.

En octubre de 2015 se iniciaron formalmente las labores del Centro realizando estudios de ciencia aplicada y desarrollo tecnológico en biotecnología, biología de la conservación y manejo de recursos naturales.

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