viernes, abril 26, 2024

Piden que recursos confiscados a gobiernos corruptos se utilicen para concluir las obras que iniciaron hace ocho años en Tlalnepantla.

Tal como lo anunció en sus redes sociales, el diputado Max Correa Hernández acompañado de vecinos y organizaciones ciudadanas del municipio de Tlalnepantla, se congregaron afuera de la construcción del Hospital Los Caracoles, a fin de exigir al gobierno del estado de México la conclusión de los trabajos que iniciaron en el 2012 y aun el nosocomio no está en operación.

Es por ello que el legislador por Morena propuso utilizar recursos del Instituto para Devolver al Pueblo lo Robado a fin de terminar con las obras y habilitarlo como un hospital que brinde los servicios que se requieren en esta colonia (Jorge Jiménez Cantú) ante el cierre del hospital Valle Ceylán en 2017 y especialmente con la emergencia sanitaria por Covid-19.

Explicó que las obras iniciaron hace ocho años con un presupuesto inicial de 382 millones de pesos, pero aún faltan cerca de 700 millones para concluirlas en su totalidad y “el dinero no sólo podrá salir de los impuestos ciudadanos, sino que debe salir de lo que se les ha confiscado a los corruptos que han gobernado el país”.

Correa Hernández insistió en que la corrupción de los gobiernos del PRI y PAN han contribuido a que el hospital de Los Caracoles no se haya terminado y muestra de ello es que el ex gobernador Enrique peña Nieto ,en su último informe de gobierno, reportó esta obra como concluida, cuando falta casi un 40 por ciento.

Confió en que el presidente Andrés Manuel López Obrador escuchará la demanda de los vecinos de Tlalnepantla y otorgará el presupuesto necesario para poner en operación el nosocomio que tanta falta hace y proporcione los servicios de salud a cerca de 300 mil personas de la zona de Tlalnepantla y municipios vecinos.

Asimismo, el legislador se comprometió junto con su compañero de bancada Gabriel Gutiérrez Cureño, a proponer un punto de acuerdo para que el Congreso del Estado de México realice un recordatorio al INSABI a fin de que retome la construcción de este hospital.

A nombre de los manifestantes, la vecina María Dolores Burgos afirmó que sus peticiones “no son caprichos sino una necesidad muy grande porque estamos en un momento de pandemia, y si este hospital estuviera funcionando no tendríamos que correr a la Ciudad de México a solicitar servicios médicos”.

A la manifestación llegó la niña Kenia acompañada de su madre, quien denunció que debido a que no existen servicios médicos especializados en esta zona del estado, ella tiene que trasladarse al hospital del IMSS de Legaria, ubicado en la ciudad de México, para ser atendida de su mal formación de venas y arterias en la cabeza.

Detalló que desde hace seis meses, se traslada con su hija diariamente en transporte público al hospital, lo que consideró de gran riesgo porque son más susceptibles a contraer el Covid-19, por lo que hizo un llamado a los tres niveles de gobierno para concluir el nosocomio.

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