En cinco años, el mandatario mexiquense no logró concluir los diez hospitales que están en obra negra desde hace una década.
Por no Eduardo Alonso
Alfredo Del Mazo Maza, gobernador del Estado de México, llega a su quinto año de gobierno sin resultados en materia de seguridad, ya que de septiembre de 2017 a julio de 2022 el número de actos delictivos que si fueron denunciados ante la Fiscalía General de Justicia estatal llegó a 1 millón 782 mil 496 carpetas de investigación.
Este lunes el priísta Alfredo Del Mazo, titular del Poder Ejecutivo, a través del Secretario General de Gobierno Luis Felipe Puente, cumplirá con su obligación y entregará a los 75 diputados titulares del Poder Legislativo estatal, los documentos que sustentan su desempeño al frente de la administración mexiquense durante su quinto año de gestión en la entidad habitada por 17 millones de personas.
Alfredo Del Mazo, nieto e hijo de los también ex gobernadores priístas del Estado de México Alfredo Del Mazo Vélez (1945-1951) y Alfredo Del Mazo González (1981-1986), respectivamente, no entregará buenas cuentas en materia de salud, pues los diez hospitales estatales que están en fase de construcción desde hace casi una década no los ha logrado concluir pese a que los diputados le autorizaron que pidiera dinero prestado a la banca privada para ese propósito.
Respecto de la creación de infraestructura vial estatal el gobernador mexiquense tampoco logró consolidar un proyecto propio estatal, ya que continúo con la inercia de política pública de su antecesor Eruviel Ávila Villegas, hoy Senador de la República, pues se dio a la tarea de otorgar concesiones a la iniciativa privada, es decir permitir que privados construyeran carreteras privadas de paga.
En este tenor el ambicioso programa de bacheo, rehabilitación y mantenimiento profundo de caminos y carreteras en la zona sur de la entidad, exigido y autorizado (con una partida presupuestal especial para dicho propósito) desde hace casi dos años por los diputados locales, Alfredo Del Mazo tampoco podrá decir misión cumplida, ya que no hay avances sustanciales en dicho proyecto carretero de rehabilitación.
En materia educativa, al paso de cinco años de administración Delmacista, 372 mil 454 mexiquenses, mayores de 15 años, no saben leer ni escribir, es decir son analfabetas.
De acuerdo con el más reciente Censo del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) el Estado de México, después de Chiapas (512 mil analfabetas), se ubica como el número dos en cuanto a las personas que radican en su territorio y no tienen el conocimiento para dar lectura a algún texto, ni comunicarse a través de la escritura.
Los indicadores laborales no son alentadores ya que durante la gestión de Alfredo Del Mazo el porcentaje de la Población Económicamente ActiVa (PEA) en informalidad, creció de manera sustancial al ubicarse en 56.4% de acuerdo con el reporte oficial más reciente emitido por la Secretaría del Trabajo federal.
Lo anterior significa que 4 millones 252 mil 288 trabajadores mexiquenses realizan su actividad laboral cotidiana sin ningún tipo de cobertura social-legal, es decir no cuentan con contrato y prestaciones de ley como seguro social, aguinaldo, utilidades, vacaciones pagadas, derecho a contar con financiamiento para vivienda social (Infonavit), préstamos y posibilidad de jubilación, vía pensión o Afore, entre otros.
Dicho reporte trimestral puntualiza que de la totalidad de los trabajadores mexiquenses informales 55.5% son hombres y 57.8 mujeres.
De los cuales 2.9% realizan su actividad sin pago; 32.5% son asalariados (sin prestaciones); 18.7% trabaja en la informalidad por su cuenta y 2.2% como empleadores (patrones) sin auto-prestación alguna (porcentajes que suman 56.4%).
