La Secretaría de Hacienda, en conjunto con la Asociación de Bancos de México y la CNBV, anunciaron el diseño de un programa de créditos para pequeñas y medianas empresas que, en una primera etapa, canalizaran 10 mil millones de pesos para promover el financiamiento.

Por Claudio Jaime Batlle

Recordará que recientemente el INEGI en su Estudio sobre Demografía de los Negocios, informo que el número de empresas que cerraron permanentemente sus puertas en México, solamente durante el 2021 fue de 1 millón, 583 mil 930.

Aunado al impacto financiero global generado por la pandemia, así como por la actual e incipiente crisis energética provocada por la invasión rusa en Ucrania, así como de materias primas tanto en el sector manufacturero como alimenticio, resulta urgente que las economías locales implementen acciones en favor de sus sectores productivos y devolver a las cadenas de suministro particulares su movilidad a través de políticas de sustitución de proveedores.

En este contexto el titular de la Secretaría de Hacienda anuncio el 24 de marzo pasado, durante la inauguración de la 85 Convención Bancaria que frente al reto de fortalecer el sistema financiero la banca jugará un papel fundamental para apuntalar la reactivación económica del país.

El titular de la SHCP destaco el objetivo de avanzar hacia una banca más profunda, accesible, digital y sostenible, especialmente en beneficio de empresas medianas y pequeñas para impulsar las cadenas productivas de proveedores nacionales asimismo señaló que, en esta agenda, el financiamiento es importante y el papel del sector bancario, tanto de la banca comercial como la de desarrollo, es primordial.

Y a pesar de que durante el evento no se precisaron detalles de cuando darán inicio con el programa de apoyo a los pequeños y medianos productores, el riesgo de un nuevo confinamiento por COVID-19 continua latente a causa de los recientes casos registrados en Asia donde ese tipo de medidas han sido tomadas para prevenir los efectos catastróficos tanto para la salud como para la economía que desencadenaron la primer ola de contagios.

Lo anterior repercutiría drásticamente en las pequeñas y medianas empresas mexicanas que lograron sobrevivir y que sin el adecuado apoyo financiero estarían condenadas a desaparecer y afectar a uno de los principales generadores de empleo y participación en el PIB nacional.

Y no lo olvide, no compre lo que no necesita y no gaste más de lo que gana.