De acuerdo a la Comisión Nacional de Búsqueda, hasta agosto de este año existe un registro de 110 mil 964 personas desaparecidas.

La secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde Luján, indicó que la base de datos de referencia al corte del 22 de agosto de 2023, publicada por la anterior titular de la Comisión Nacional de Búsqueda, acumula 110 mil 964 registros, los cuales se dividen en cinco rubros:

Personas localizadas: 16 mil 681 (15 por ciento)

De este total, 3 mil 945 fueron encontradas gracias al mecanismo de visita casa por casa; 4 mil 134 por informe confirmado de defunción; 8 mil 405 tras reportes de autoridades locales y 197 están privados de la libertad en centros penitenciarios.

El procedimiento para formalizar las localizaciones contempla:

Integrar la documentación al expediente del caso.

Registrar la localización en las bases de datos, lo que no implica su eliminación del registro, es decir, seguirá encontrándose en la base de datos con un cambio de estatus.

Informar a la persona denunciante sobre la localización.

Personas ubicadas: 17 mil 843 (16 por ciento)

En este universo se desprenden 14 mil 743 con indicios de vida en bases de datos masivos, que incluye el Registro Civil o la inscripción a los Programas para el Bienestar, mientras que 3 mil 100 presentan muestras de vida a través de llamada telefónica, sin embargo, no hay una confirmación cara a cara.

La estrategia en este aspecto es:

Continuar con las visitas casa por casa y la campaña de llamadas telefónicas.

Mantener el cruce de bases de datos que permita su localización.

Recibir información adicional de la ciudadanía o familiares que permita la localización.

Registros sin datos suficientes para identificar a la persona: 26 mil 090 (24 por ciento)

En estos casos no existe o no es válido uno o varios de datos, entre ellos, nombre completo, fecha de nacimiento, lugar de nacimiento, nacionalidad, sexo, edad, CURP o algún otro dato de identificación.

Por esa razón se convoca a la población, a las familias y a los reportantes a aportar más datos que serán cruzados nuevamente con las bases de datos para generar nuevos indicios.

Estos indicios se aportan a las fiscalías locales y a las comisiones para que sean incluidos en las carpetas de investigación y así generar una búsqueda individualizada.

Registros identificados, pero sin indicios para la búsqueda: 36 mil 022 (32 por ciento)

En este grupo poblacional se cuenta con el CURP o algún dato, sin embargo, no hay un teléfono de contacto, dirección o información suficiente para su localización, por lo que la herramienta principal es la búsqueda generalizada.

En este rubro es necesario:

Contactar nuevamente al reportante para obtener mayor información.

Recabar nuevos datos de la ciudadanía o familiares que permitan continuar con la búsqueda.

Denuncias confirmadas: 12 mil 377 (11 por ciento)

La herramienta principal es la búsqueda individualizada o por patrones en colaboración con las fiscalías estatales.

Los pasos a seguir son:

Definir una estrategia de búsqueda particular según sus características específicas.

En el caso de desapariciones que comparten circunstancias, se efectúa un análisis de contexto para articular una búsqueda por patrones.

Mantener contacto con las familias y reportantes para obtener mayor información.

Adicionalmente se tienen mil 951 registros duplicados (2 por ciento).

“Todos los registros de desaparición cuentan con una estrategia para poder continuar con la localización y la búsqueda, no importa en qué segmento se encuentren, todos cuentan con una estrategia y en todos vamos a continuar con estas acciones de localización. (…) No vamos a descansar hasta seguir con todas las acciones en todos los casos que forman parte del Registro Nacional de Personas Desaparecidas”, abundó la titular de Segob.

La Búsqueda Generalizada es una de las cinco estrategias definidas en el protocolo homologado, aprobado el 6 de octubre de 2022, como resultado de la construcción de propuestas de familias, colectivos y especialistas.

Los cinco tipos de estrategias de búsqueda que existen en el protocolo son:

Inmediata: La llevada a cabo al momento de recibir el reporte; consiste en seguir el rastro de forma rápida y eficaz.

Individualizada: La que se realiza centrándose en el individuo y sus características particulares cuando se cumplen los supuestos legales para presumir la comisión de un delito contra la persona desaparecida. Es muy importante en estos casos la denuncia ante la fiscalía.

Por patrones: Cuando hay casos que pueden buscarse en conjunto debido a que las circunstancias de desaparición tienen puntos en común.

Generalizada: La que se ejecuta a través de cruces de bases de datos masivos y accionando en territorio a partir de los indicios obtenidos.

De familia: Cuando debe buscarse a la familia de una persona presuntamente desaparecida.

Acompañaron en la actualización del reporte: el jefe de gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama; el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, Félix Arturo Medina Padilla y el secretario técnico del Gabinete de la Presidencia y coordinador general de Programas para el Bienestar, Carlos Torres Rosas.