viernes, mayo 10, 2024
“Abrazos y no balazos”, total fracaso

Si gobierno determina ir contra delincuentes habrá miles de muertes de criminales e inocentes:  Iván Chávez Espejel

Iván Chávez Espejel, presidente de Ciudadanos Uniformados Asociación Civil, aseguró que la Guardia Nacional tiene la capacidad, experiencia, armamento, personal suficiente y todos los elementos que se requieren para hacer frente a los grupos criminales que operan en el país, pero como el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) no quiere ir a la confrontación porque sabe perfectamente que morirían miles de delincuentes e inocentes, no está dispuesto a dar la orden.

En entrevista con Veneranda Mendoza, periodista del programa “De Análisis” que se transmite de lunes a viernes de 13:00 a 14:00 horas por la plataforma  https://comunicadores.mx/  el abogado de policías a los que se les han violentado sus derechos y especialista en tareas de seguridad, Iván Chávez aseguró que la política de seguridad implementada por el presidente López Obrador que se resume en su frase de “abrazos y no balazos” es un fracaso, porque ante esa premisa, las y los delincuentes seguirán haciendo de las suyas.

Entre otros factores porque cada uno de sus integrantes no está dispuesto a dejar de percibir “salarios” y dejar de contar con las ganancias millonarias que deja esa actividad en general.

En este sentido, precisó que un delincuente recibe cada semana entre 10 y 15 mil pesos, y ante ese tipo de incentivos es imposible que le hagan caso al llamado de AMLO, el cual plantea  a los delincuentes, una y otra vez, que se retiren de esa actividad.

“El fuego se combate con fuego”, con balazos; sin duda van a morir personas, y la gente se preguntará quiénes van a morir y la respuesta es todos aquellos  que están metidos en la delincuencia.

Muchos desean que las cosas se solucionen sin muertes, pero eso  no es posible porque los delincuentes saben que tiene un pie en el panteón y otro en la cárcel.

La delincuencia organizada tiene mucha gente en sus filas:  secuestradores, sicarios, halcones, vendedores, extorsionadores, ladrones, entre otros, recordó Iván Chávez.

Otro aspecto que se debe tomar en consideración para combatir a la delincuencia, dijo, es la superioridad de armamento que tienen algunos grupos criminales ante las policías locales, como la de Tlatlaya o Tejupilco.

No les podemos pedir que vayan y combatir a los delincuentes que operan en Guerrero o Michoacán con sus pistolas y rifles, su armamento es inferir al que emplean los delincuentes de esa  región, expresó.

Iván Chávez estimó que actualmente 1.5 millones de mexicanos se dedican a alguna actividad delictiva, y por ello si la autoridad federal decide confrontarlos de manera directa, sin lugar a duda habrá miles de muertes de secuestradores, violadores, narcomenudistas, extorsionadores y personas dedicadas al robo en general, pero también de gente inocente porque “cuando podas el jardín también te llevas a algunas florecitas”, porque eso es inevitable y precisamente eso es lo que ha querido evitar el presidente López Obrador, dijo.

El titular de Ciudadanos Uniformados no dudó en sostener que la policía y los investigadores saben perfectamente quiénes y dónde están los delincuentes, pero no han querido enfrentarlos porque se registrarían enfrentamientos de manera permanente.

Respecto a los procesos de depuración registrados al interior de las fuerzas de seguridad a través de los Centros Estatales de Control y Confianza, Iván Chávez, aseguró que en su gran mayoría son procesos que significan una gran simulación porque esas instituciones no sirven y prueba de ello es que los policías malos siguen en las calles y aquellos que se atreven a denunciar irregularidades y/o actos de corrupción son despedidos de manera inmediata.

Dijo que en su experiencia como abogado y defensor de policías a los que se les han violentado sus derechos humanos y laborales al ser despedidos de manera injusta, ha logrado comprobar cómo los exámenes de Control y Confianza sirven para correr, en muchos casos, a buenos policías que simple y sencillamente no encajan con las prácticas irregulares de sus mandos, como el caso de Teotihuacan donde pese a que el Director reprobó las evaluaciones  el alcalde impidió que lo dieran de baja.

Opinó que la mejor forma depurar a las instituciones policíacas es a partir de las Contralorías internas, es decir de los mecanismos ya existentes de supervisión y evaluación, porque cualquier policía sabe qué compañero es corrupto, alcohólico, incumplido, deshonesto, flojo e irresponsable y delincuente, pero en la mayoría de los casos no se denuncian entre ellos mismos porque iniciaría el conflicto.

El Control de Confianza ha sido la mejor herramienta para echar de la institución a los que s oponen a la corrupción.

Chávez Espejel dijo que los Centros de Control se empezaron a corromper como otras instancias de las policías municipales y estatales y ante eso la única salvación son las Contralorías policíacas, insistió al recordar que son 7 las evaluaciones que contemplan el examen que determina si se es o no un buen policía.

En cuanto a la operación  de la Guardia Nacional, Iván Chávez, recordó que prácticamente el 80 por ciento está integrada por marinos y miembros del ejército mexicano; por lo que es falso que sea una instancia de civiles.

Consideró que la policía estatal está muy disminuida porque solo hay aproximadamente 3 mil elementos policíacos estatales por turno; cifra insuficiente para dar cobertura a todo el territorio mexiquense.

Por último, Iván Chávez, aseguró que el marco jurídico estatal es bueno y no requiere adecuación sino simplemente una estricta aplicación.

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