El hambre neutralizó la fobia
Lo que inició como una forma solidaria de ayudar a los más afectados en el estado de México por la contingencia sanitaria, ya se volvió una costumbre que no se terminará una vez concluida la pandemia por Covid-19, aseguró Tanya Vázquez, líder de las Famosas y una de las fundadoras de “Un Toque de Ayuda”.
“A nosotras no nos preocupa la cifra del número de gente a la que estamos proporcionando ayuda porque sería muy poco para lo que requieren los grupos más vulnerables, es una actividad titánica pero que nos hace sentir satisfechas”.
Con esta iniciativa, el grupo conformado por trabajadoras sexuales y chicas trans de Toluca reparten cada día aproximadamente cien comidas al día y “a veces salimos en la noche a repartir burritos, café y atole en diferentes puntos de la ciudad donde se necesite”.
A través de redes sociales, su actividad es difundida para que con toda transparencia, se pueda apreciar la forma en que se aplica la cooperación que les hacen llegar algunos ciudadanos como una forma de cubrir una de las necesidades básicas que es la alimentación “y nuestra intención es que nadie se quede con hambre”.
Esto, dice Tanya, no tiene como propósito la creación de una empresa, es un proyecto de colectividad donde “tratamos de divulgar actos de humanidad y solidaridad y seguiremos manteniéndonos como en un principio emergente que no teníamos planeado”.
Asimismo, aclaró que no militan en ningún partido político y tampoco reciben ayuda de ninguna empresa y mucho menos de las instituciones gubernamentales, lo que confirma el acto ciudadano solidario de muchas personas que “nos donan ayuda en especie, en algunas ocasiones nos dan frijoles, pan, tortillas que nosotros convertimos en comestibles y compartimos o bien hay personas que compran una de las comidas en el comedor que habilitamos en Toluca y dona otra para quien lo necesite”.
Nuestra labor va dirigida especialmente a los grupos vulnerables que tiene que ver con niños, mujeres y personas de la tercera edad a quienes “no sólo les proporcionamos comida, sino productos como frituras que pueden vender para contar con un ingreso extra”.
Además, “Un Toque de Ayuda” también ha llegado a poblados de Metepec y Zinacantepec y aunque Tanya Vázquez acepta que han recibido comentarios homofóbicos, han sido más las muestras de solidaridad y agradecimiento por la labora que realizan. “En México hay libertad de expresión, pero falta mucho que hacer en educación; hay que enseñar a las nuevas generaciones el valor del respeto porque a los adultos es muy difícil reeducar y es casi imposible porque es generacional”.
Finalmente, dice Tania, es que “Un Toque de Ayuda” se replique en otros estados de la república con la esencia de la solidaridad ciudadana.